Kristy Whilden de Elmer Fue educadora musical durante 10 años cuando se enteró de que estaba perdiendo la audición debido a una pérdida auditiva neurosensorial progresiva. Temía que su pérdida auditiva pusiera fin a su capacidad para disfrutar de las artes escénicas. Kristy cayó en una espiral de depresión que la llevó a ella y a sus hijos a un refugio por un tiempo. Decidida a seguir adelante, volvió a la escuela y obtuvo una licenciatura en Estudios para Sordos/Lenguaje de Señas Americano (ASL). Kristy y su hija Hailey, que aprendió ASL para comunicarse con su madre, cofundaron Teatro Silencioso Manos Arriba en Millville que ha producido actuaciones y eventos únicos e impactantes para que las comunidades sordas, con problemas de audición y oyentes disfruten como uno solo.